Interesante
análisis de la entrada de Alcoa en la tecnología cilindro-parabólica: por una parte, bajada de costes de los concentradores; por otra, más consumo de aluminio y por tanto de energía (salvo que sea reciclado, claro, aunque esto también consume). En todo caso, el análisis debería comparar el ciclo de vida del nuevo concentrador con el del antiguo (que también evidentemente requiere energía para su fabricación).
No hay comentarios:
Publicar un comentario