Salvador Rueda lleva ya muchos años hablando de esta idea (yo al menos recuerdo haberla escuchado ya en el 2002), pero parece que finalmente va a convertirse en realidad en Barcelona, y medios internacionales
como Vox se hacen eco. Ojalá esta publicidad ayude a otras ciudades a animarse y a aplicar la iniciativa, que sería estupenda para todos los que sufrimos las ciudades y los coches.
1 comentario:
Me parece más práctico cerrar algunas calles para que solo puedan ser usadas por residentes, buses, ambulancias, camiones de basura, etc. El vehiculo puede llevar un censor que lo identifique y permita que un ordenador de control le de una luz verde. Si pasa un vehículo sin autorización le toma una foto y se le envía una multa de 50€.
Este método puede instalarse a bajo costo, y si causa alguna alteración crítica se puede cambiar. Por ejemplo, las horas de aplicación de estos límites. En cuanto al límite de velocidad, yo siempre manejo en primera y bien lento por calles secundarias, para evitar pegarle un golpe a alguien. No creo que cueste mucho imponer un límite 15 a 20 kmh.
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