Mankiw sigue con su cruzada contra los que dicen (decimos) que la desigualdad es un problema. Ahora, aportando evidencias de que a la gente no le molesta la desigualdad, sino la injusticia. Que prefieren sociedades justas, aunque sean desiguales, que sociedades igualitarias pero injustas. Así que, nos dice Mankiw, dejemos de preocuparnos de la desigualdad, que lo importante es la injusticia.
Y así, en teoría, tiene razón. Lo que pasa es que:
- primero, que la gente prefiera una cosa u otra no necesariamente indica que la desigualdad sea moralmente aceptable o no;
- segundo, que, aunque Mankiw las separe, realmente los conceptos están muy unidos. Creo que no hay mucha gente en el debate que cuestione que pueda haber desigualdad, y que, seguramente, una sociedad absolutamente igualitaria sería injusta. Lo que se cuestiona es el nivel de desigualdad, que no parece moralmente aceptable...y además el origen de esa desigualdad, que no es el distinto nivel de esfuerzos o de capacidades de unos u otros, sino habitualmente la suerte de haber nacido rico o pobre.
1 comentario:
La desigualdad en una sociedad con justicia es moralmente aceptable porque las alternativas son todas peores. El idealismo que trata de imponer igualdad dónde esta no existe lleva a dictaduras y terribles abusos de los derechos humanos, y al negar la naturaleza humana, que es heterogénea y desigual, termina llevando la sociedad a un nivel de esclavitud y represión como los que vemos en Cuba, Norcorea, etc.
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