Según Krugman, básicamente un desastre. La razón: no hacer caso de Keynes. Como en muchos otros escritos de Krugman, creo que tiene razón en sus críticas, y en muchas de sus propuestas, como el mayor uso de behavioral finance, pero le cuesta ver la viga en el ojo propio, lo cual en mi modesta opinión resta algo de credibilidad a sus comentarios. Y eso lo dice un firme defensor de la existencia de externalidades, racionalidad acotada, y muchos problemas para el funcionamiento eficiente de los mercados, por si hay alguna duda de mis creencias económicas. Lo que pasa es que no creo que eso implique necesariamente una intervención masiva de los gobiernos al estilo keynesiano, ya que muchas veces eso no es bueno ni para salvarnos de la recesión, ni para sacarnos de ella, como ya se vio en los 70. Y eso ni siquiera suponiendo que los gobiernos sepan hacerlo bien, que es otro de los problemas que tenemos habitualmente (véanse algunos programas de estímulo más bien absurdos por ahí). Por eso, quizá una conclusión que sacamos muchos, tras ver las críticas a la Macro no keynesiana, y los problemas de la keynesiana, es que la Macro no vale como receta, y sólo como estimación de posibles escenarios, más allá de algunas relaciones básicas…
3 comentarios:
Bueno, creo que el artículo de Krugman tiene algunas conclusiones más profundas y más preocupantes (para la macroeconomía) que lo de "no hacer caso a Keynes". Creo que lo más interesante de su reflexión es el giro hacia la "economía del comportamiento" y la asunción de que se está tratando con un mundo más desordenado, más incierto, más impredecible, de lo que los economistas suelen suponer, y me llama la atención su crítica hacia la excesiva fe de muchos economistas en los modelos matemáticos de gran belleza formal, pero posiblemente muy alejados de la realidad... porque creo que él mismo ha hecho uso de ellos en sus trabajos.
Creo detectar incluso un cierto acercamiento a las ideas de Nassim N. Taleb, particularmente en lo que dice de los mercados financieros. Me gustaría saber tu opinión al respecto.
Gracias y un saludo.
Efectivamente, tienes razón en que no es simplemente "no hacer caso a Keynes", me pasé simplificando...aunque sigo creyendo que ésa es su línea argumental fundamental en este y el resto de sus artículos sobre el estímulo. En cuanto a la economía del comportamiento, yo creo que está más cerca de Thaler y Kahnemann que de Taleb: creo que él es más partidario de incorporar la irracionalidad contrastada de los consumidores de una manera más formalizada, al estilo de lo que hacen los primeros, mientras que Taleb propugna un acercamiento a esta irracionalidad de una forma más heterodoxa. En todo caso creo que es un tema apasionante. Muchas gracias por el comentario.
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