miércoles, 10 de julio de 2019

El realismo de Michael Liebreich sobre la nuclear

Unas cuantas verdades incómodas por parte de Michael Liebreich, respaldadas por el último New Energy Outlook (que espero resumir pronto).

Su conclusión:
My take on the nuclear debate: wind and solar alone can’t provide enough zero-carbon power to decarbonize the economy in the near term; the overwhelming priority is to keep existing nuclear plants open; when it comes to new plants, the current generation of plant designs won’t cut it on economic grounds; and for goodness sake, let’s get serious about developing SMRs and researching the generation of nuclear technologies that might even follow them.

We have serious work to do, tough choices and compromises to make. Let’s get on with it!

Parece que los franceses están pensando hacerle caso.

ADD: Relacionado, las cuentas del accidente de Chernobil en More or Less.

2 comentarios:

Fernando Leanme dijo...

Yo no lo veo como una verdad incómoda. Pero supongo que gente que ha desarrollado una ideología casi religiosa hacia energía eólica y solar puede estar decepcionada cuando oye las realidades de la vida. Supongo que para ellos es parecido a cuando a un niño le explican que los juguetes se los regalan los padres y que no hay Santi Clós.

Ahora tengo que mencionar algo mas duro: ustedes de verdad piensan que es sensato ayudar a un país como Somalia o Sri Lanka a construir una planta nuclear?

Vintage Rocker dijo...

Lo que no es muy realista es pensar que va a haber un solo SMR vertiendo kW a la red antes de diez años (vamos, le asigno tantas posibilidades como a que realmente existan el conejo de pascua, el ratón Pérez y los reyes magos, y toda la humanidad hayamos estado décadas haciendo el gilipollas comprando regalos a los niños que esas bondadosas figuras habrían procurado sin nosotros si les hubiéramos dejado).
Si queremos descarbonización, la única energía nuclear posible es la (obsoleta, diseñada en los años 60 del siglo pasado) segunda generación de reactores PWR y BWR. Y eso dando marcha atrás a todas las modificaciones de diseño post-Fukushima, y volviendo a las exigencias de seguridad de los 80. Y posiblemente asumiendo que sea el doble o el triple de cara que entonces, dadas todas las tecnologías que hemos olvidado como sociedad.
Pero como eso nos da yuyu, lo que tendremos es lo que tenemos. O sea, ni descarbonización ni Cristo que lo fundó, y en el 2030 un nivel de emisiones igual al actual (en el escenario más favorable)...