viernes, 30 de diciembre de 2016

Buenos propósitos para la innovación energética

En estas comidas navideñas Santi me ha vuelto a recordar su pesimismo respecto a la innovación y la mejora del bienestar. Yo comparto muchas de sus preocupaciones, pero quizá como Tabarrok, creo que no tenemos evidencia suficiente para, a partir de lo que ha pasado en los últimos años, inferir que todo seguirá así. Así que me niego a despedir el año sin afirmar mi optimismo en el ingenio humano :), y reúno unos cuantos enlaces de interés al respecto, en el ámbito de la energía:

- Bill Gates sigue empeñado en buscar soluciones al cambio climático, y ya ha creado el primer fondo de inversión para financiar proyectos que lo necesiten.
- Gates responde así a esa necesidad que tiene el sector energético de una financiación de largo plazo, tal como nos recuerda Varun Sivaram en este MOOC que ha montado con Georgetown, y que resume sus ideas respecto a la innovación energética. El syllabus es muy útil.
- Pero en todo caso, para que esto funcione, no basta la financiación, hacen falta ideas! Y al menos en España tenemos mucho camino aún por recorrer para situarnos en una posición aceptable a este respecto. Así que hay que seguir trabajando.

Que paséis una buena Nochevieja y entrada de año!!

1 comentario:

Fernando Leanme dijo...

Imaginense canales de autopistas, pasos a desnivel, calles, y estacionamientos, que solo permiten coches de este tamaño:

http://www.motorauthority.com/news/1025216_production-ready-toyota-iq-minicar

No creo que sea sensato regular el tipo de motor, lo que se debe regular son las dimensiones y el peso. Al darle ventajas de traslado y estacionamiento se incentiva ese mercado. Y el resultado es un ahorro enorme en el consumo de combustible. Una vez que la infraestructura está hecha para darle preferencia a estos vehículos, la tecnología de los vehículos en si cambiara a medida de los años. Supongo que algunos serán híbridos enchufables, otros tendrán una mini turbina de butano, y algunos funcionaran con baterías. Pero eso no importa, porque no tenemos buena idea de lo que se vaya inventar. Lo que sí está claro es que habrá un incentivo enorme para desarrollar vehículos livianos y sistemas de propulsión que no tomen mucho espacio.