El otro día me decía un buen amigo que me estoy haciendo anarquista, por proponer "pasar" de la regulación en vista de que, si seguimos así, en este país nunca tendremos una como Dios manda. En realidad, lo que yo digo no es tanto que hay que pasar por la izquierda a la regulación, sino que, si no están atentos reguladores e incumbentes, un día se van a encontrar con que ya no tienen clientes o negocio porque otros más listos se los han quitado.
Quizá el escenario más radical sea ese en que los clientes se desconectan de la red, usando las baterías de Tesla. Pero otro menos radical, pero que también puede cambiar bastante el negocio, es este que se comenta en esta entrada: uno en que los grandes gestores de datos (Google, Apple, etc.), suplantan a las utilities como gestores (y, por supuesto, explotadores) de la información de los clientes. Si a eso le sumamos que Google y demás no parecen tener problemas para que los clientes les den sus datos, mientras que las utilities se enfrentan a la desconfianza de los consumidores (véase el lío con algunas implantaciones de smart meters en EEUU), pues ya la hemos liado.
Como decía antes, podemos dedicarnos a crear regulación muy compleja para proteger la privacidad de los clientes, como quién posee los datos de los smart meters y a quien se pueden ceder; podemos tratar de poner barreras y limitaciones para usar los datos....Pero un día de estos ya no habrá datos que analizar porque el análisis ya lo habrán hecho otros sin pedir permiso (ni necesitarlo).
1 comentario:
Pues si se necesita de una estrategia tipo "disruptive" pues que sea así, de todas formas ya las utilities llevan muchos años sentados en su negocio y no se ve mucho por mejorarlo radicalmente.
Publicar un comentario