Pablo
nos resume los cambios propuestos para el sistema europeo de comercio de emisiones, ETS, que incluye por primera vez una válvula de seguridad, es decir, un sistema para garantizar un precio en el mercado. En este caso la válvula funciona al revés de lo habitual, es un suelo para el precio del CO2. Esto en el fondo lo que persigue es convertir el mercado de permisos en un impuesto, algo
no necesariamente malo.
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