Hace ya muchos años, mi amigo Gonzalo me regaló Walking, de Thoreau, un himno a las bondades de caminar, y dejar la mente libre, sin músicas, sin ruidos, encontrándose con uno mismo. Y por eso me ha resultado curioso estos días leer esta entrada de Cal Newport justo sobre el mismo tema, hablando justo de un entorno por donde seguramente pasaré el próximo lunes, las White Mountains de Vermont, camino de Montreal. Más casualidades: justo el otro día en la librería local encontré este libro que promete mucho también, sobre el mismo tema, y que no me compré porque ya no sé si me cabe en la maleta de vuelta :).
Pues eso, que hay que caminar más. Intentad aprovechar el fin de semana, si os deja el calor.
ADD: Muy apropiada, la cita de Cervantes en mi librería favorita de Águilas:

Coincido totalmente. Una manera de perseverar en la caminata es tener perro. Te garantiza 2 paseos diarios. Yo llevo así 13 años.
ResponderEliminarPor lo del libro…lo tienes en kindle 😀